Como mejorar nuestra expresión escrita.

07.02.2014 16:20

 

 

Cuando despertó, el dinosaurio todavía estaba allí”.

            Augusto Monterroso.

 

Según tengo entendido y de acuerdo a la historia de la literatura, la cita que acabo de hacer y que se encuentra al inicio de este artículo, es una de las obras mas cortas que un escritor profesional haya hecho.

Es increíble, verdad. Sin ánimos de entrar en un ejercicio de análisis de tipo semántico, ortográfico o de cualquier otra índole respecto al mundo de la creación literaria.

 Incluso, sin entrar en detalles sobre las características de la redacción del mismo, por ejemplo: ¿Por qué tiene que ir la coma donde está? Lo que realmente deseo rescatar aquí es la importancia de dominar el hábito de la escritura, de la redacción.

 En esta serie de artículos vamos a estar revisando algunos tips que debemos tener en cuenta para poder mejorar nuestra expresión escrita.

Vamos a estar viendo desde diferentes enfoques al texto en cuestión, para poder potencializar el efecto del mismo; los tipos de documentos abarcan una amplia gama: el objetivo es mejorar continuamente nuestra capacidad de transmitir nuestras ideas ante los nuevos retos de comunicación. La Internet es el principal.

 Habrá que advertir que no vamos a entrar en detalles técnicos o científicos respecto a un determinado escrito. Es decir, no haremos (por mencionar un ejemplo),  un análisis exhaustivo sobre aspectos semánticos de un discurso.

 Este sitio y sus artículos solo pretenden ser un espacio de reflexión y a través del mismo, encontrar la sintomatología que nos afecta en el hábito de la expresión escrita.

 Debemos tener en cuenta que lo que buscamos es aprender a escribir de una manera cada vez más eficiente y estética.

 A propósito de la reflexión. Es importante para mí, que dejes tus comentarios respecto a este y todos los artículos que leas en este sitio. De lo que se trata es de mejorar nuestro contenido, nuestras experiencias y nuestro deseo de aportar nuestro grano de arena.

Llegará tal vez el momento en que tengamos que analizar, de manera particular un aspecto que concierne a un escrito. Por ejemplo: asesorar una tesis.